El movimiento que estaba predestinado al fracaso
Desde el principio el movimiento estaba predestinado a fracasar. Había comenzado con 120 hombres. Decididamente pocos, si se tiene en cuenta que su territorio tenía una población de cuatro millones. Además, la mayoría era analfabeta y pobre. Eran hombres de trabajo, lejos estaban de hacer algo que pudiese marca alguna diferencia.
Algunos, los menos, habían salido de su país; no tenían ninguna experiencia ni ninguna preparación cultural. Su nación estaba bajo opresión. El pueblo estaba debilitado, los gobernantes eran corruptos, la religión había sido absorbida.