A unos novios con problemas
Lo primero que quisiera decirles es que la relación que tienen es muy especial, es muy valiosa, y realmente no vale la pena que la echen a perder por celos, inseguridades, orgullo y otras tonterías. Han cometido errores.
Les ha faltado arriesgarse al compromiso. Han tenido problemas por relacionarse más a partir de su inseguridad que de su amor. Han tratado de controlar al otro.
Yo les propongo que no se estacionen ahí, que pasen la hoja a esos errores, que no discutan quién hizo qué, que no se culpen mutuamente y que dejen de lado el orgullo. Perdónense de corazón. Aprovechen esta crisis para madurar y para resolver a fondo el problema. Tienen que preguntarse por qué llegaron a esto y qué es lo que tienen que hacer. Olvídense del «tú hiciste», «es que tú». Mejor compartan sus sentimientos: me sentí triste, me sentí sola, solo, me sentí confundida, confundido... no sé. Lo que sientan. No se pongan a la defensiva, en cambio busquen cómo comprenderse y cómo ayudarse uno al otro.